martes, 30 de septiembre de 2008

Todo el mundo quiere al señor de la nariz grande

Poulet sans prunes

Hola. Soy yo de nuevo. La que tiene de todo y no utiliza nada. ¿Por pereza? Quizás... Más que nada por no tener nada nuevo que contar. 
Hoy puede que sí tenga o puede que no. Puede que a alguien le interese o puede que alguien decida que Gran Hermano es más interesante que lo que una aspirante a Diplodocus pueda decir.

La televisión me asquea y propicia mis escapadas a la habitación a ver series en linea. Skins es mi favorita en este momento. Ojalá yo fuera a Rusia y viera leñadoras en shorts que atacan sexualmente a musulmantes confundidos.

Hoy he ido a Ikea y he hecho reír. He olído el peor de mi vida y Josu se ha seguido riendo. Y no he comprado nada, que es lo mejor todo. Bueno, no... miento. He entrado en la tienda de comida y casi se me cae una lagrimita al ver marcas de productos que había en los supermercados de Dinamarca. Hasta en el Netto, oiga. Una emoción...y 6 euros menos en mi bolsillo.

He decidido cambiar de blog porque no me parecía justo continuarlo. Y me apetece dar el coñazo un rato. No diré cosas tan interesantes a la par que graciosas como Pablo, ni me decicaré a repetir lo "guay" que es estar de Erasmus. Me decicaré a hablar de lo que me salga del huevo izquierdo, sin más ni más.

Mi móvil ha dejado de funcionar de nuevo.